*NUEVA CRÍTICA* DYANGO - PUÑALADAS EN EL ALMA

15.05.2010 00:07

 

¿Cómo se oiría un porteño cantando zarzuela o cuplé? Aplicando la misma analogía, ¿cómo se escucha a un catalán cantando tangos? La respuesta la tiene el cantante barcelonés Dyango en su nuevo trabajo discográfico, “Puñaladas en el Alma”. Si bien José Gómez Romero –tal su nombre real- ya había incursionado tímidamente en el 2x4 que tanto le apasiona, incluyendo algunos tangos en trabajos anteriores (por ejemplo, el vals “Alma, corazón y vida”, “Los mareados”, “El día que me quieras” entre otros). En este nuevo disco, registrado con el importante aval y respaldo de una compañía como Sony Music, cuenta con una producción respetable, al haber convocado a la Orquesta Sinfónica de Praga, dirigida por el prestigioso músico Carlos Franzetti. Es un detalle de gran lujo el haber incluido a esta sinfónica en dos clásicos como “Grisel” de Mores y Contursi y “Malena” de Lucio Demare y Homero Manzi. Pero lo que debería ser una gran virtud del disco, lo convierte paradójicamente en su gran defecto. Tiremos la baraja sobre la mesa y pongamos las cosas en claro: Estas dos versiones están bastante alejadas del estilo tanguero que los puristas del género pretenderían. Demasiada orquestación hace que “Grisel”, por caso, se convierta en un melodrama demasiado cargado de dramatismo y extremadamente largo. Eternos 5 minutos y medio cuando ningún tango que se precie de tal sobrepasa los 3 minutos de duración. Si bien la fuerza vocal de Dyango no ha mermado con el paso del tiempo, debemos decir que la cascada voz del catalán, por momentos parece querer superar a la orquesta y lo hace sonar forzado. Además, “Grisel” abre el disco y luego de los 5 minutos y pico del tema hará creer al oyente que está viendo los créditos finales de alguna película de Steven Spielberg: mucha orquesta, poco tango. Por suerte las pistas siguientes están un poco –sólo un poco- más emparentadas con el tango tradicional. En “Desencuentro” de Troilo y Cátulo Castillo Dyango pretende imitar el fraseo del “Polaco” Goyeneche. No tiene ni para empezar, pero bueno, se le nota más voluntad que oficio para cantar tangos. “Romance de Barrio” suena más pasable. Luego viene una curiosa versión de un tango instrumental de Piazzolla: “Oblivion”. La letra la aporta Marcos Llunas, hijo de Dyango. Quién sabe si Piazzolla alguna vez quiso que le pusieran letra a su creación, así que hay poco para juzgar. Hay más clásicos, como “Garganta con arena”, “Como dos extraños”, “Maquillaje”, “Uno”, “Nunca tuvo novio” y un desconocido tango llamado “Íntimas”. Hay otra especie de “opereta” con el tema número 10. Se trata de “Estrellita”, página firmada por un desconocido Manuel María Ponce Cuellar. En esta pista Dyango comparte el tema con uno de sus hijos cantantes, Marcos Llunas. Y aquí nos llevamos quizá la sorpresa mayor de “Puñaladas…”. Llunas despliega su caudal de voz como un cantante lírico –tal parecería que se ha dedicado a cantar lírico después de años de "esa maldita obsesión" de dedicarle temas a niñas anoréxicas-, y nos sorprende: por momentos parece que estamos frente a un Marcelo Álvarez o un Darío Volonté. No sabíamos de esta veta del primogénito de Dyango.
Para redondear, “Puñaladas en el alma” es un disco muy bien producido pero con resultados desparejos. Por momentos el disco descuella, por otros cae en ampulosidades que creemos innecesarias y hacen que el trabajo pierda el horizonte que pretende seguir. Del mismo Dyango depende que estas “Puñaladas en el alma” no se conviertan en “Puñaladas en los oídos”.

GUILLERMO MARIONI


NUESTRA CALIFICACIÓN: 6 puntos.


¿POR QUÉ NO 10?: Demasiada orquestación no permite vislumbrar tango en algunas pistas.


PRECIO: $ 35,00.


SONY MUSIC